El mediapunta no se ha recuperado a tiempo de la dorsalgia que tampoco le permitió estar frente al Mirandés y que apareció justo tras una gonalgia que le impidió medirse al Girona

El argelino Foued Kadir fue, muy a su pesar, el gran protagonista de la penúltima sesión de entrenamiento de la semana. No en vano, ayer estaba previsto que los servicios médicos de la entidad de las trece barras evaluasen cómo se encontraba de su dorsalgia, dolencia que ya le impidió estar con el equipo frente al Mirandés y que tampoco le ha permitido ejercitarse con normalidad desde el lunes.

Y, desgraciadamente para él, los galenos verdiblancos no le dieron buenas noticias. De hecho, su evolución va algo más lenta de lo inicialmente previsto, por lo que está descartado para el choque de mañana frente al Valladolid. En este sentido, el atacante seguirá trabajando al margen de momento, si bien se espera que a lo largo de la próxima semana pueda volver al grupo, estando disponible para la visita a Las Palmas.


Sea como fuere, este contratiempo vuelve a poner de manifiesto el mal fario que persigue a Kadir desde que regresó de la Copa de África, a principios de febrero, ya que ha dejado de ser indiscutible en el once para disputar apenas 82 minutos repartidos entre los encuentros frente a Ponferradina (25) y Albacete (57). Precisamente en ese último choque se despidió de una titularidad que se le ha resistido desde entonces por diferentes problemas físicos.

Primero, una gonalgia en la rodilla derecha le impidió estar contra el Girona, mientras que su ya mencionada dorsalgia apareció justo después, apartándole del equipo desde entonces, haciendo que la banda derecha pase a ser propiedad de Portillo, quien ha jugado a modo de falso interior, cayendo al centro y permitiendo que el lateral ejerciese como carrilero.

Noticia: ESTADIO DEPORTIVO