El entrenador azulón Bordalás en la rueda de prensa posterior al partido contra el Real Valladolid, analizó la derrota y fue muy crítico con el arbitraje del partido, señaló que la jugada del posible penalti de Joaquín fue mano y debió de ser pitado: “La acción del penal, que para mí es penalti claro. Estas son las cosas que no entendemos, ayer a Gayá se le pita a una mano y hoy el balón le pega en el bíceps y es penalti. Teníamos muchas ilusiones en este partido. El balón le pega en el bíceps y es mano. El del Valencia es menos claro y se pitó”.