Noticia de Arturo Alvarado para el Diario de Valladolid de El Mundo
El juez declara responsable a ‘alguien’ del club de una deuda de 569.357€. El TSJ de Castilla y León desestima el recurso presentado por un tal ‘D. Teodoro’ en su nombre y entiende que la entidad debió pagar a Hacienda el dinero de dos traspasos, que fue destinado a satisfacer nóminas
El Tribunal Económico-Administrativo Regional de Castilla y León ha desestimado el recurso contencioso-administrativo número 738/14 interpuesto por D. Teodoro contra la resolución del TEAR de Castilla y León, Sala de Valladolid.
El objetivo de la reclamación era anular el acuerdo del Jefe de la Dependencia de Recaudación de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria en Castilla y León, que declaró al citado D. Teodoro responsable solidario por las deudas del Real Valladolid C.F. S.A.D. por un importe de 569.357,43 E.
La sentencia, del pasado 28 de diciembre, es firme y contra ella no cabe recurso ordinario alguno, con imposición de costas procesales a la parte recurrente. La noticia, sentencia incluida, fue tuiteada ayer por Roberto Bayón y publicada por la web de Pucela Fichajes.
El origen del problema son los derechos económicos generados por los traspasos de dos jugadores a equipos extranjeros. El club los dedicó al pago de nóminas cuando desde Hacienda entienden, en virtud de los acuerdos de aplazamiento de pagos suscritos, que debían ir a satisfacer parte de la deuda.
Según el punto tercero de los fundamentos jurídicos de la sentencia, «el Real Valladolid adeudaba significadas cantidades a la Hacienda Pública, por diferentes conceptos, obteniendo determinados aplazamientos tributarios. En garantía de estos aplazamientos, mediante escrituras públicas otorgadas por el hoy recurrente en nombre de aquella entidad deportiva, se cedieron el 50% de los derechos económicos de los traspasos de determinados jugadores de fútbol».
«Posteriormente -agrega el escrito- se obtuvo un nuevo aplazamiento que afectó al otro 50% de los derechos de traspaso. Se fija un límite temporal de tres años, descubriendo la administración tributaria que aquella entidad deportiva, por medio del hoy declarado responsable solidario, había traspasado en ese tiempo a dos jugadores a un club de fútbol extranjero, destinando el producto de aquel traspaso al abono de las nóminas pendientes con otros jugadores».
D. Teodoro esgrime en su recurso que de «no haber dedicado las cantidades obtenidas por el traspaso de un jugador al abono de los salarios adeudados al resto de la plantilla, esta situación hubiera determinado el descenso inmediato de categoría futbolística del Real Valladolid con la absoluta inviabilidad económica de la sociedad».
La respuesta a este argumento en la sentencia es contundente. «Parte de un error de planteamiento inicial. Si la mercantil recurrente [Real Valladolid] había comprometido la totalidad de los derechos de traspaso de su plantilla como garantía de los aplazamientos de la deuda tributaria que mantenía con la Hacienda Pública, simplemente no podía disponer de ellos. Y si el actor lo hizo conscientemente, como lo hizo, debe responder por ello. No se trata de un incumplimiento culposo sino esencialmente doloso». La identidad del citado D. Teodoro -así figura en la sentencia- permanece en secreto pese a su condición legal de responsable solidario.
