Competición solo estima parcialmente las alegaciones del Club
El Comité de Competición de la RFEF, reunido este martes, decidió suspender por un partido de suspensión al entrenador del Real Valladolid, Miguel Ángel Portugal, “en aplicación del artículo 122 del Código Disciplinario”, por su expulsión en el pasado partido ante el Albacete Balompié por, según el acta arbitral del colegiado andaluz López Amaya, “dirigirse desde fuera del área técnica al árbitro asistente nº 1, realizando aspavientos y a gritos, en los siguientes términos: “¡No puede sacar, hay dos balones dentro!”.
El órgano disciplinario solo estimó “parcialmente las alegaciones” del Real Valladolid. En su resolución, Competición constata que “en efecto, hay dos balones dentro del terreno de juego, por lo que de la expresión «No se puede sacar, hay dos balones” (sic) cabe inferir una mera advertencia, no una protesta en sentido estricto”. Y, por lo tanto, considera que los hechos no pueden subsumirse en el artículo 120 del Código Disciplinario.
Este artículo 120, se señala que “protestar al árbitro principal, a los asistentes o al cuarto árbitro, siempre que no constituya falta más grave, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos o por tiempo de hasta un mes”.
El Comité de Competición “aprecia una conducta antideportiva del entrenador, al no limitarse a dirigirse al asistente de forma calmada, educada y serena, sino que dirige la frase anteriormente transcrita realizando aspavientos y a gritos, saliendo levemente del área técnica”, por lo que juzga que los hechos constituyen una infracción del artículo 122, que dice lo siguiente: “incurrirán en suspensión de hasta cuatro partidos o multa hasta 602 euros aquéllos cuya conducta sea contraria al buen orden deportivo cuando se califique como leve”.
Contra la presente resolución, el Club interpondrá el correspondiente recurso ante el Comité de Apelación de la RFEF.
Como estaba previsto, Timor fue suspendido también por un partido, en este caso por acumulación de cartulinas amarillas.
