David Timor es una de las caras nuevas del Real Valladolid. Valenciano de nacimiento, llegó a finales de julio procedente de Osasuna para firmar por tres temporadas. El inicio liguero no ha sido el esperado por este mediocentro zurdo, con gol y que no rehusa el choque, pero el pasado miércoles, en la Copa, dejó claro que esta temporada puede tener sitio en el once de Rubi.

Gran partido el del miércoles en Gijón…
Creo que nos salió un buen partido a todos. Lo importante era pasar la eliminatoria y coger minutos los que no estábamos jugando. Y que el míster nos tenga en cuenta, para cuando él crea oportuno que sepa que estamos para ayudar en lo que podamos.

Se vio a un bloque con más empaque, veteranía y oficio que el rival.
Creo que el Sporting sacó a un equipo muy joven, con muchos chavales de la cantera. Es el único equipo que no ha hecho fichajes este año y en ese sentido se notó esa diferencia. También el partido se nos puso de cara con el 0-1, tras el descanso casi en la primera ocasión metemos el 0-2 y, aunque ellos nos complicaron con el 1-2, tenemos la suerte de hacer el 1-3 y ahí se acabó el partido.

Aparte del buen partido general, se vio a un Timor perfectamente acoplado tanto en ataque como en defensa.
Intenté hacer mi trabajo, lo que pide el míster y la verdad es que me salió buen partido. Por eso contento tanto en lo individual como en lo colectivo, porque lo importante era pasar la eliminatoria.

¿Le está costando adaptarse porque, de momento, se ha quedado fuera de dos convocatorias?
Estoy trabajando bien y luego es el míster el que decide. No ha contado conmigo en dos partidos y en Lugo jugué diez minutos, pero hay que aceptar sus decisiones e intentar cambiar la situación, buscar una oportunidad y aprovecharla.

¿Dónde está más cómodo, en el medio defensivo o más arriba?
El miércoles jugamos con doble pivote y cuando estábamos en ataque pedía que uno estira más y el otro equilibre, pero turnándonos. Por eso estoy cómodo, a veces estará más atrás y otras no.

Firmó por tres temporadas en una apuesta fuerte por ambas partes. En Osasuna, ¿no acabaron de salirle las cosas como quería?
Cuando llegué al filial me salió un buen año y eso me dio la oportunidad de subir al primer equipo y firmar un contrato profesional. El primer año me salió bien, jugué bastantes partidos aunque no muchos minutos. El segundo empecé en el banquillo, luego tuve la oportunidad de jugar pero un error mío me pasó factura. De no haber cometido ese error con la afición a lo mejor hubiesen ido mejor las cosas. Pero es ya una etapa que se acabó y ahora solo pienso en el Valladolid.

Hablan de usted como de un mediocentro zurdo, de calidad, con gol y que si tiene que meter la pierna, lo hace.
Intento no solo aportar en ataque. Cuando estaba en Valencia se me exigía un poco más, con los años la he mejorado. Y ahora la complemento bastante bien. A veces sí entro demasiado duro, pero está bien de vez en cuando, aunque controlándose.

Parece claro que si la Copa es para reivindicarse, usted lo ha hecho.
Estaba esperando a la Copa. Al ver que me quedé fuera en dos partidos, estaba esperando la Copa para coger minutos y demostrarle que puede contar conmigo para lo que quiera y es lo que intenté demostrar.

¿Qué club se ha encontrado al llegar a Valladolid?
Un club humilde, muy familiar todo. Y la plantilla una de las mejores de Segunda, de las mejores en las que he estado, incluso mejor que la de Osasuna cuando estuve en Primera. Junto con el Betis puede ser la mejor, pero luego hay que demostrarlo en el campo, que la Segunda es muy larga, y hay que ir partido a partido sin confiarse. Ya nos ganó el Lugo y no hay que fiarse. Cada vez hay menos diferencias.

Y ahora Alcorcón…
Será un partido complicado porque saben a lo que juegan. El míster les mete ambición, garra e intensidad, y juegan bien sus armas.