Llevamos ya demasiado tiempo sufriendo un calvario tanto presidencialmente como en el banquillo, una dirección que no toma decisiones, una dirección deportiva imposible de resolver los problemas de plantilla, y que es incapaz de sacar a jugadores que no convienen ni al vestuario ni al entrenador.

El dueño del club llegó con la expectativa de ser un mecenas salvador del Club y la afición le acogió con los brazos abiertos y los corazones totalmente esperanzados, confiábamos en sus deseos y que fuera capaz de asentar al equipo en Primera División.

En cambio, nos prometió la Champions en un corto espacio de tiempo y además sin poner ni un Euro de inversión en la plantilla ya deteriorada por la falta de fondos y la mala gestión de la antigua dirección. En cambio, se centro en lo estético, no menos importante por supuesto, el campo y sus aledaños. Las competencias entre el Ayuntamiento y el Club han sido y son demasiado lentas y terriblemente farragosas y hacen que el estadio y sus alrededores sigan en el siglo 19. 

En su favor hay que reconocer que la masa social del Club ha aumentado y la ha colocado en unos números que nadie recuerda y que por eso hacen mucho mas complicado comprender como se deja arrastrar deportivamente a un club casi centenario. La eliminación del foso y el lavado de cara del exterior del estadio también son dignas de mención, pero hasta ahí sus logros. Decepción absoluta con un astro mundial que no ha sabido o no ha querido implicarse con el Club que tanto amamos. 

Creó la figura del director de fútbol en la figura de Paulo André, una figura de la que no sabemos nada, no sabemos que planes tiene con respecto al Club, ni en cuanto a juego ni en cuanto a metas, y sobre todo, cuales son los plazos que se ha propuesto para cumplirlo, es una persona que no se ha dirigido públicamente a la afición, y tampoco sabemos que se propone, lo que si sabemos es que lo que hace no funciona, y lo sabemos por los resultados deportivos que ha tenido durante su gestión al frente del Club que supuestamente dirige. Tiene a sus espaldas 2 descensos, también dos ascensos (que dirían muchos) pero eso no se hubiera producido de tener un plan claro y acertar con los fichajes de jugadores, cosa que no han dado resultado de ninguna manera.

Las gestiones de las plantillas y de los entrenadores tampoco es que haya sido mucho mejor, han traído a jugadores que solo buscaban llenarse sus bolsillos y les importaba muy poco la ciudad y sus aficionados, jugadores que cuando las cosas se ponen “difíciles” se buscan otros equipos y dejan los colores que te pagan cambiando de aires, entrenadores que no son aptos para el puesto y que se traen como experimentos o porque son amigos de este o del otro pero no conocen la competición y que no explotan totalmente el potencial de los jugadores que tienen a su cargo. A otros se les mantuvo en el puesto mas de la cuenta y eso provocó uno de los descensos del equipo, en cambio se precipitaron con el despido del que nos pudo dejar en Primera y el sustituto terminó provocando otro de los descensos acumulado por Ronaldo. 

Con los directores deportivos tampoco es que la gestión haya sido mucho mejor, han sido incapaces de encontrar a uno que tenga las ideas claras para traer a los jugadores, se hacen contratos que hipotecan al Club en jugadores que su rendimiento tiene que ser determinante y en cambio no dan la talla deportivamente y complican la vida del vestuario. 

Todo esto duele demasiado a una afición que sufre partido a partido y ve como el equipo que aman sigue a la deriva. Es el club que quieren ser desde pequeños y que sus padres les enseñaron a querer, el escudo que aman y que ven maltratado y arrastrado por los campos del territorio nacional. Si el dueño del club no se siente a gusto o no se siente querido por esta afición que sepa que es por sus decisiones y no por otro motivo, si quiere vender el Club que lo haga hoy mejor que mañana y por eso vuelvo a preguntarme:¿CUANTO MAS TIENE QUE AGUANTAR LA AFICION?