Tras un cierre de mercado ajetreado y un último día intenso en movimientos, el director deportivo Fran Sánchez y el director del gabinete de presidencia David Espinarcomparecieron en sala de prensa este viernes para explicar la situación en la que queda la primera plantilla del Real Valladolid, así como la del Promesas, explicar las diferentes operaciones y reflexionar sobre la industria del fútbol.
Fran Sánchez arrancó su intervención con una fotografía general de la situación, con las 19 bajas producidas y una plantilla final de 24 jugadores gracias a nueve incorporaciones y a la promoción de Fresneda. Sobre el Promesas, apuntó las diez bajas y las siete altas, y aprovechó para agradecer a los futbolistas que han finalizado su etapa blanquivioleta por su desempeño, así como a los empleados que han dedicado su trabajo estas semanas.
Ya en el turno de preguntas el director deportivo reconoció estar «satisfecho» aunque «con la espinita de Toni». Pero mostró su optimismo para asegurar que «estoy ilusionado con lo que viene, tengo plena confianza en el grupo y lo más importante es estar todos juntos y con ilusión por conseguir el objetivo de la permanencia». Echó la vista atrás para reconocer que no se habría creído si «el día del Huesca, que no dependíamos de nosotros para subir, me dicen que hoy iba a estar al lado de Kenedy, cinco años en propiedad, en Primera», y también fue prudente para, por encima de nombres propios, resaltar «el valor del grupo, cuerpo técnico, afición, Club».
Sobre la salida de Toni Villa explicó que «tener a un chico a disgusto nos hizo pensar, no se trata de liberar el salario, contábamos con él pero no teníamos claro que fuésemos a renovarle, él entendía que el Girona le ofrecía una buena situación y en la tarde de ayer se agitó todo».
Dar la vuelta a la industria
Argumentó Fran Sánchez, sobre los contratos de larga duración, que es «parte de la ingeniería económica, si firmas a un jugador durante cinco años la amortización del coste va por año, reduces la amortización en el año presente y extiendes a años futuros, nosotros también hemos valorado eso en algunos casos y es una opción para que con el control económico que LaLiga nos impone podamos hacer movimientos».
Además, el directivo indicó que «la única salida en forma de traspaso con fijo es la de Alcaraz, el resto están condicionados a variables» mientras que cifró el coste total de los fichajes del Real Valladolid en este mercado de 2022 en «cuatro o cinco millones de euros».
