El entrenador del Real Valladolid Pacheta no pensaba llegar al 5 de agosto con 4 guardametas en la plantilla, y esto le está suponiendo un problema importante tanto en la portería como en la confección de la plantilla. Actualmente está trabajando en los entrenamientos con 3 porteros del primer equipo (Jordi Masip, Roberto Jiménez y Sergio Asenjo) y uno del filial (Álvaro Aceves). La idea tanto de Pacheta como del club es la de contar con dos porteros de la primera plantilla y tirar de Aceves como tercer portero, pero la operación salida de Roberto Jiménez se está eternizando y está generando problemas tanto a Pacheta como a la dirección deportiva.

Se esperaba que a lo largo del mes de julio se hubiese solucionado la salida de Roberto, pero la ausencia de ofertas ha hecho que la única forma de que salga sea rescindiendo, y el jugador no está poniendo las cosas fáciles para ello, se está acogiendo a su contrato y salvo giro inesperado, su rescisión será un importante lastre económico para la confección de la plantilla. En los últimos días se ha especulado con su regreso al Alavés, pero no existe ninguna propuesta en firme, en tal caso, los clubes esperan a la rescisión para poder ficharle de manera más económica.