En enero de 2019 el Real Valladolid buscaba en el mercado a un delantero que fuese factible para la entidad, y se fijó en el atacante del Córdoba Sergi Guardiola que en ese momento estaba cedido en el Getafe de Ángel Torres. 3 años después a través de un informe de calificación del segundo concurso de acreedores del Córdoba CF SAD recoge que la operación de venta del delantero con destino Real Valladolid fue una “operación ruinosa” para el conjunto andaluz.

Desde el Día de Córdoba se informa de todas las cifras del traspaso que terminaron de arruinar en ese momento al equipo cordobés. Su traspaso se cerró en torno a los 3 millones de euros, pero el Córdoba tuvo los siguientes gastos:

  • 1,5 millones de euros al Getafe (se rompió su cesión que era hasta el 30 de junio).
  • 10% de estos derechos económicos eran titularidad de la mercantil Eisenar Sport.
  • Joaquín Vigueras Sport, empresa del agente del jugador, percibió unos honorarios por la supuesta intermediación de 466.666 euros.
  • Mesas Sport, en esta misma operación, recibió también 150.000 euros.
  • Sanciones impuestas por LaLiga por incumplimiento de las Normas de Control Económico de la patronal, que costaron 135.000 y 253.600 al Córdoba CF SAD, y las operaciones financieras (792.120 y 233.574).

De este modo, tal y como informa el citado medio: el perjuicio económico total al club es de más de 4,3 millones de euros. Ante tal hecho, el administrador concursal califica dicha gestión de «temeraria y nefasta por sus resultados». Además ese año el Córdoba descendió a Segunda B, lo que limitó y mucho sus fuentes de ingresos para pagar deudas.