El ex entrenador del Real Valladolid Francisco Maturana ha hablado para el medio A la Contra en una de las cuestiones que comentó fue sobre su etapa en el Real Valladolid que inició en 1990. Al llegar a Pucela indicó que se podía ganar la Liga: “Cuando uno va para alguna parte, todos los entrenadores tenemos que pensar en ganar. En ese tiempo no había celular, ni internet… Vos hoy le dices a cualquier persona que Valladolid va a ganar la Liga y te dirán que estás loco. Pero en ese tiempo, no se sabía. Entonces, había ilusión”.

También tuvo palabras sobre los colombianos que llegaron aquel año a Pucela: “¿Sabe que eso lo pensé yo? Y resulta que cuando terminó el primer torneo (1990-1991), si no estoy mal, perdimos 1-0 con Atlético de Madrid. Y las luces del estadio se apagaron y hubo fuegos artificiales, y yo decía: “Dios mío, ¿qué están celebrando? Si quedamos novenos”. Eso era el logro de Valladolid, mantener la categoría. Cruyff se enamoró de ese Valladolid. A ese Valladolid llegó Fabio Capello con una tarjeta del señor Silvio Berlusconi. El Real Madrid mandó un chico para que viera ese Valladolid, y ese chico era Rafa Benítez. Entonces, no puedo decir que fui un desastre allá. Llevé al equipo jugadores colombianos que conocía, que tenían pedigrí”.

Sobre las críticas al Pibe Valderrama indicó que: “En ese tiempo era difícil recibir a un colombiano y, sobre todo, un colombiano que era el número 10. El número 10 en Europa, entonces, era tipo Platini, que hacía 12 goles por temporada, que pegaba dos tiros en el palo por partido. El Pibe era otro tipo de jugador, que ahora mucha gente reconoce. Pero, en ese momento, era contracultural, exótico. Los tiempos han cambiado. Cuando Freddy Rincón llegó al Madrid, en el Bernabéu pintaron con letras negras: “Un negro en el Real Madrid es un blanco perfecto”. Ahora, te reciben con todo, sos de la high. Antes había esa segregación. Aunque, debo decirlo, yo nunca fui víctima del racismo”.