El sábado a las 17:00 Horas nos dimos cita en los anexos para otro partido de Liga del Grupo II de la Segunda división B entre nuestro Promesas y el filial del Deportivo Alavés. 

Un partido pasado por agua, y en el que en los primeros minutos los nuestros estuvieron faltos de ideas y sin acierto en el centro del campo. No me gusta mucho destacar a nadie porque considero que el Fútbol es un deporte de equipo y en el que tienen que predominar los que lo forman, pero hoy no queda más remedio que hacerlo.

En esta primera parte hubo dos jugadores (en mi opinión personal) que destacaron y estuvieron a la altura de la trayectoria que tenía el equipo hasta este momento: Doncel y Gorka.

El extremo y el cancerbero fueron los que mantuvieron los ataques de los visitantes cuando más y mejor atacaba el filial del Alavés, hasta que el colegiado expulsó al jugador del Alavés Rodrigo y desde ese momento los locales empezaron a soltarse. 

En la segunda parte, con uno más, la grada se las veía más prometedoras, pero no, el árbitro también expulsó con roja directa a nuestro futbolista Diego Allende, en una jugada en la que el árbitro consideró que era el último defensor. Así las fuerzas se igualaron. Desde ese momento, los jugadores locales se asentaron más en el terreno de juego, todos menos Gaizca que emepezó a medir mal las salidas y puso el acongoje en la gente.

Ya terminando el encuentro salió la clase y el olfato goleador de Miguel de la Fuente, en una jugada entre Doncel y del mismo Miguel, subió al marcador el tanto que a la postre sería el definitivo. Un partido que me ha dejado la reflexión de que el equipo ha hecho de los anexos un fortín inexpugnable en el que todavía no han dejado escapar ni un solo punto.

SI FUERA FÁCIL NO SERÍAMOS DEL PUCELA