Artículo escrito por Víctor Fernández

(@VictorPucela73)

Desde la llegada de Ronaldo al Real Valladolid se ha venido especulando con la posibilidad de una cesión del brasileño Vinicius al club pucelano.

Obviamente se trataría de un golpe de efecto que volvería a poner al Pucela en el mapa futbolístico nacional a unos niveles a los que no estamos acostumbrados desde hace bastantes años. Mediáticamente la posible llegada de Vinicius supondría, a buen seguro, que el Valladolid tuviera líneas en periódicos y minutos de radio a nivel nacional con lo que conlleva todo esto; sin embargo, la duda que surge es si realmente al Valladolid le interesa deportivamente esta opción.

No cabe duda de que estamos ante uno de los jugadores con más futuro del fútbol mundial pero, por mucho que nos vendan desde Madrid, por el momento es sólo eso: un proyecto de gran jugador. Sinceramente, me preocupa que un jugador al que muchos “entendidos” colocan como un miembro indiscutible del once madridista, termine recalando en un equipo que va a pelear, en principio, por la permanecía. ¿Cómo encajaría este cambio de expectativas un chico tan joven? Y, sobre todo, ¿como encajaría en un vestuario tan unido como el pucelano?.

Otra cuestión que puede dar lugar a recelos es si Vinicius llegaría con la condición “sine qua non” de ocupar un puesto en el once de Sergio, lo cual no sé hasta qué punto sería bueno para el equipo y para jugadores de casa como Waldo o Toni que en teoría pelearían con un puesto con el carioca.

De todos modos tampoco se trata de ser agorero y verlo como algo negativo, obviamente el brasileño es un buen jugador que, en caso de terminar, vistiendo la blanquivioleta seguramente ayudará, pero a la hora de afrontar un fichaje de este tipo hay que tener en cuenta todos los aspectos y conviene no olvidar quienes somos y qué valores nos han traído hasta donde estamos.

Confío en que Miguel Ángel Gómez lo tenga en cuenta.