Tras el inicio de temporada podemos decir que gran parte del buen momento del Real Valladolid se debe a la pareja de centrales que hasta la fecha lo ha jugado todo: Fernando Calero y Kiko Olivas. 

Ambos jugadores comenzaron a compenetrarse la temporada pasada tras la llegada de Sergio González, ya que con Luis César habían jugado poco juntos, y lo poco que lo habían hecho no llamaba la atención precisamente para bien. Esta temporada salvo el partido contra el Celta de Vigo, han demostrado ser de los mejores centrales de la Categoría, lo que les está valiendo que varios equipos se hayan fijado en ambos. 

Posiblemente Fernando Calero esté siendo una de las revelaciones de Primera en estas primeras 7 jornadas. Central que está sorprendiendo al resto de equipos por su rapidez, buena colocación y exquisito trato del balón. Varios equipos han puesto sus ojos en él y ya la dirección deportiva del Real Valladolid trabaja en su renovación para subirle su cláusula de salida que a día de hoy es de 11 kilos.

Kiko Olivas está siendo una de las sorpresas positivas para la afición del Pucela. Su temporada pasada fue más bien mala pese a mejorar bastante al final de la misma. Sin embargo esta campaña está rindiendo a un nivel impecable y es el completo perfecto a Calero. También hay equipos que le tienen en su agenda observando sus evoluciones. 

Gran parte del éxito que pueda tener el Real Valladolid esta campaña depende de estos jugadores, que hasta la fecha están siendo de lo mejor de un equipo que marcha viento en popa.