En el año 2016 se alcanzó un acuerdo entre la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) para fijar un salario mínimo tanto para para los jugadores de Primera División como para los de Segunda. 

Desde que se firmase dicho acuerdo, los jugadores del Real Valladolid siempre se han ceñido al de Segunda División, pero si este sábado finalmente terminan ascendiendo contra el Numancia, los jugadores que tienen el salario mínimo duplicarán sus sueldos. En Segunda se trata de de 77.500 euros, mientras que en Primera es de 155.000. Por lo tanto, de certificarse el ascenso, el jugador del Pucela que menos cobraría sería la cantidad de 155.000 euros.