Recientemente, el jugador del Real Valladolid, Jaime Mata, ha sido papá de un niño al que han llamado Teo.

Un nuevo pucelano que se une a la afición blanquivioleta. Y no solo ha sido este pequeño el que se ha incorporado este año.

José Arnaiz Junior llegaba al mundo en la recta final de la temporada, cuando su papá estaba a tope en el césped, dejándose la piel para que su equipo disputará Play off.

Iban Salvador también ha sido otro de los que aumentaba la familia, está vez a las puertas de las navidades.

Y es que la llegada de estos peques, además de ser una gran alegría, une a sus padres aún más si cabe a esta ciudad y a este equipo.

Los seguidores pucelanos aumentan, y quién sabe si dentro de unos años veremos a alguno de ellos en las categorías inferiores o debutando con el primer equipo.

La sangre blanquivioleta corre por sus venas. La familia pucelana crece.