Egea ha alabado tantas veces esta temporada el 4-4-2 que el uso del 4-2-3-1 en las últimas semanas cogió a alguno por sorpresa. Pretendía el técnico facilitar la aclimatación de Míchel al grupo, considerado por el cuerpo técnico como un futbolista que puede marcar las diferencias en la media punta. Pero prescindir de un delantero también merma el peligro ofensivo del Oviedo. Ayer Egea no lo quiso reconocer públicamente pero parece que el 4-4-2 puede ser el sistema elegido para jugar ante el Valladolid.

Mientras en Pucela, tras la llegada de Roger y Rennella en el mercado de invierno, el equipo ha pasado de jugar con el media punta a dos delanteros. Hoy los dos equipos jugarán con el tradicional 4-4-2