Kepa finalmente ha estado 514 minutos sin encajar, los que van desde que Álvaro, del Elche, batiese al portero vizcaíno, al tanto del 1-1 de Callens de ayer. Ni Mallorca, ni Córdoba, ni Alcorcón ni Ponferradina fueron capaces de marcarle al portero blanquivioleta, que vio como el central soriano, justo a un minuto para el descanso, le superaba en un cabezazo en el segundo palo.

Fue en una de las acciones polémicas del encuentro de ayer, ya que en la jugada anterior, Nikos acababa en el suelo sangrando del párpado por un golpe fortuito con Marcelo Silva. El árbitro decidió dejar seguir la jugada, Julio Álvarez se aprovechó por banda izquierda, centro y el defensa del Numancia, con la ayuda de Kepa, rompió esa imbatibilidad.

El Real Valladolid era hasta ayer uno de los conjuntos con mejores prestaciones defensivas, sobre todo tras la llegada de Portugal. Pero ya se sabe que los partidos ante el Numancia siempre son locos y con muchos goles. Y el que se vio en el José Zorrilla fue otro ejemplo más.