Las condiciones de los Campos Anexos y de Zorrilla, ponen en jaque a los blanquivioletas
El estado de los terrenos de juego del Valladolid, tanto el de entrenamiento en los Campos Anexos como el del propio Estadio José Zorrilla, se han convertido en un au- téntico quebradero de cabeza para los integrantes del club blanquivioleta. Los futbolistas no dudan en criticar abiertamente la mala salud del césped y el cuerpo técnico se ve obligado a regular sus planes de trabajo.
Tradicionalmente, el césped del estadio vallisoletano había sido un ejemplo de cuidado, a pesar de tener que luchar contra las duras condiciones climatológicas de la zona. Sin embargo, los problemas se han sucedido en los últimos años y la solución no parece sencilla, más allá de esperar a que llegue el buen tiempo y de dar descanso, en la medida de lo posible, a los terrenos de juego.
La primera plantilla ya ha descartado la opción de entrenar en el césped de Zorrilla, tal y como solía hacer una o dos veces por semana. Los 14 días de reposo van a permitir que el aspecto del feudo blanquivioleta mejore notablemente ante la visita del Numancia el próximo domingo. Sin embargo, esta opción no se puede aplicar al campo de entrenamiento y sólo la subida de las temperaturas podría proporcionar un pequeño respiro.
Noticia: MARCA
