El volante mexicoamericano Juan Carlos Durán y el portero Bill Miksch, dos muchachos de 16 años y productos del fútbol de Chicago, ya están viviendo en el centro deportivo del Real Valladolid, de la Segunda división de España, con un grupo de juveniles locales e internacionales que aspiran a dar el salto al fútbol profesional de ese país.
Durán, un estudiante de McHenry West High School que jugó en los equipos de McHenry Vipers y Crystal Lake Force, y Miksch, alumno de Warren Township High School y ex jugador de FC Lake County, fueron ubicados en España gracias a la gestión de Santiago Rubio Gilabert, director del Real Valladolid USA, filial del club en el área de Chicago.
“La experiencia está siendo muy buena porque entrenamos todas las semanas de lunes a viernes y los entrenadores nos ayudan a progresar mucho”, dice desde Valladolid el volante creativo Durán, de origen mexicoamericano, un jugador zurdo de gran dinámica.
Miksch, un portero que “es un tren, con mucha potencia física, de esos que salen con todo y que no hay en España”, según el entrenador Rubio Gilabert, también está disfrutando su primer mes en España y convive en el centro de entrenamiento del club con jóvenes de España, Corea, Ucrania y China, entre otros. En sus primeras semanas ambos muchachos han disputado tres partidos amistosos, que terminaron con victorias para el Valladolid.El viaje de los dos juveniles es el fruto del contacto establecido en el último verano, cuando Miksch y Durán viajaron junto a otras 33 promesas de Estados Unidos para jugar siete partidos contra las fuerzas básicas del Villarreal y varias filiales de clubes de Segunda división de España. Además los muchachos se dieron el lujo de alojarse en la ciudad deportiva Las Rozas, el sitio de entrenamiento de la selección española en Madrid.“Durmieron en las misma camas donde durmió Iniesta, por ejemplo”, comentó Santiago Rubio Gilabert, del Valladolid USA, filial del club español en Estados Unidos y organizador del viaje. “Hicieron entrenamientos con Rafa Rubio, que es entrenador del Atlético Madrid, y en Valladolid con Pedro Coria, encargado de las fuerzas básicas del Valladolid, que estuvo evaluando a los jugadores”.Entrenar y mostrar sus condiciones en Europa durante el pasado verano fue una experiencia que marcó a los muchachos locales.“Es algo que solo se da una vez en la vida”, dijo Miksch. “Jugar allá en el verano contra equipos de calidad fue algo que me cambió la vida”.Después de aquel viaje, el mismo Pedro Coria viajó a Chicago para observar a 130 jugadores locales en un campo de entrenamiento en Pingree Grove, cerca de Elgin, y continuar el proceso de evaluación. Finalmente, Durán y Miksch fueron invitados a formar parte de los equipos juveniles del Valladolid y residir en su complejo deportivo durante un año.El Valladolid es un club interesado en descubrir talento por todo el mundo y cuenta con un hotel para los jugadores extranjeros y de otros sectores de España, al lado de su estadio José Zorrilla, uno de los escenarios del Mundial 1982 y donde jugó el mexicano Cuauhtémoc Blanco representando al club entre 2000 y 2002. El hotel cuenta con 35 cuartos y aloja jugadores internacionales, incluso de países de Medio Oriente y destinos tan lejanos como Taiwan, cuya federación suele enviar a sus mejores talentos.“El jugador va a formarse como persona y como jugador. Ellos van a jugar al fútbol y estudiar. Van a estar allá todo el año con visa de estudiante, van a vivir en el hotel y el campus del Valladolid y a entrenar de lunes a viernes. Van a tener partidos oficiales con las fuerzas básicas del Valladolid pero no son federados.
Cuando cumplan 18 años ya pueden firmar contratos profesionales”, explicó Rubio Gilabert. “Ahora van en una etapa crítica de formación, el Valladolid los va a formar a un alto nivel y ellos van a viajar por España, y también en Francia y Portugal. Se van en la edad justa”.Con el Valladolid, los chicos locales están en el área cercana a Madrid y, por lo tanto, enfrentarán a rivales como el Real Madrid, Atlético Madrid, Rayo Vallecano y Getafe además de otros equipos del norte del país, de regiones como Galicia y Asturias.Entre los 16 años y la etapa del comienzo de una carrera profesional, el cielo es el límite para jugadores como Miksch y Durán. Este año tres jugadores juveniles del Valladolid han saltado a la Academia y desde allí el paso siguiente es el fútbol profesional en clubes de España o de otras ligas europeas.Esta semana los chicos de Chicago viajaban a la ciudad de Salamanca, donde estarán jugando y entrenando. Mientras tanto, continúan su etapa de adaptación al nuevo país. Miksch dice que “de a poco voy avanzando con el idioma” mientras que Durán comenta que “a mí se me hace más fácil porque ya hablo español”.Para ambos la experiencia es fascinante y Miksch lo resume en una frase: “Es algo que no parece real, si un año atrás me hubieran dicho que ahora estaría jugando en España a un nivel semiprofesional, no lo habría podido creer”.
Cuando cumplan 18 años ya pueden firmar contratos profesionales”, explicó Rubio Gilabert. “Ahora van en una etapa crítica de formación, el Valladolid los va a formar a un alto nivel y ellos van a viajar por España, y también en Francia y Portugal. Se van en la edad justa”.Con el Valladolid, los chicos locales están en el área cercana a Madrid y, por lo tanto, enfrentarán a rivales como el Real Madrid, Atlético Madrid, Rayo Vallecano y Getafe además de otros equipos del norte del país, de regiones como Galicia y Asturias.Entre los 16 años y la etapa del comienzo de una carrera profesional, el cielo es el límite para jugadores como Miksch y Durán. Este año tres jugadores juveniles del Valladolid han saltado a la Academia y desde allí el paso siguiente es el fútbol profesional en clubes de España o de otras ligas europeas.Esta semana los chicos de Chicago viajaban a la ciudad de Salamanca, donde estarán jugando y entrenando. Mientras tanto, continúan su etapa de adaptación al nuevo país. Miksch dice que “de a poco voy avanzando con el idioma” mientras que Durán comenta que “a mí se me hace más fácil porque ya hablo español”.Para ambos la experiencia es fascinante y Miksch lo resume en una frase: “Es algo que no parece real, si un año atrás me hubieran dicho que ahora estaría jugando en España a un nivel semiprofesional, no lo habría podido creer”.
