Carlos Suárez, presidente del Real Valladolid, se mostró aliviado después de la victoria del equipo el domingo ante el Mirandés por 2-1 en Zorrilla, lo que permite al conjunto pucelano salir del descenso, situación en la que no estaba desde la temporada 1979-80. El Presidente afirmó que «no veía confianza entre Garitano y los jugadores. No supo convencerlos de cual era su idea y así era muy difícil. Los jugadores estaban agarrotados, no son tan malos como parecían». También señaló que el cambio principal que introdujo Portugal fue «decirles a los jugadores que podíamos perder, pero que por favor intentaran hacer lo que sabían hacer», devolviéndoles la confianza.

Noticia: AS