Defiende a sus excompañeros de las acusaciones de amaño, al tiempo que lamenta que en Sevilla le pintaran “como una mala persona

Javi Chica formaba parte de la plantilla del Betis que descendió a Segunda división la pasada temporada y que, presuntamente, según el exgerente de Osasuna, Ángel Vizcay, habría aceptado una prima de 250.000 euros por ganarle al Valladolid y perder con Osasuna durante las dos últimas jornadas, centrando principalmente la atención en Jordi Figueras y Antonio Amaya, quienes habrían negociado con el club rojillo.

El lateral, ahora en las filas del Valladolid, ha querido salir en defensa de los que fueron sus compañeros, apelando a su honestidad y profesionalidad. “Confío en todos los jugadores de la plantilla del Betis del año pasado. No creo que haya sucedido nada extraño. Si hubiera ocurrido algo, se habría escuchado en el vestuario. Es impensable e imposible que un profesional salga a perder un partido. Cuando lo leí, me quedé sorprendido, y cuando salieron nombres, también. Han sido compañeros míos en el Betis y yo confío en ellos. Creo que no es posible. En el vestuario no escuché nada. El partido del Valladolid salimos sabiendo que era el último encuentro en casa. Sufríamos cuando no podíamos salir del estadio con los coches. Al final, lo que queríamos era ganar y olvidar esa temporada desastrosa. Yo acabé reventado de intentar salir a ganar, yo siempre salgo a competir y vencer. Ninguna persona lo hace para perder”, defendió el jugador, que no guarda un buen recuerdo de su etapa como en las filas verdiblancas. “Cuando firmé por el Valladolid tenía un objetivo: demostrar que era un buen jugador y que no era la mala persona que pintaron en Sevilla. Yo no tengo que demostrar nada allí. Tengo muy buenos amigos y saben lo que valgo. Al que no ha confiado en mí, no tengo que demostrarle nada”, concluyó.

Noticia: ESTADIO DEPORTIVO