Braulio Vázquez apostó para que pidiera la cesión del Rayo
Cuando Jonathan Pereira llegó al Valladolid arropó esperanzas. “Si he venido es porque me veo capacitado para dar lo que me piden”. Ha necesitado solo tres partidos para demostrar todo su potencial y firmar en Mallorca el partido perfecto con tres goles y dos asistencias.
El delantero vigués es un trotamundos del fútbol. Empezó en las categorías inferiores del conjunto celeste, en el que duró muy poco. Los ojeadores del Villarreal se fijaron en él y con 15 años se lo llevaron a la guardería de El Madrigal. Pese a que su estatura (1,66) podría parecer un hándicap para llegar al mundo profesional, el vigués demostró que el físico importa poco. Y tuvo la suerte de que por allí (2006-07) estuviera un técnico para el que el sudor era secundario a la calidad. Manuel Pellegrini le dio la oportunidad y él respondió con un gol cuando solo llevaba un minuto en Primera.
A partir de ahí nunca ha tenido la estabilidad necesaria. Como buen delantero es un jugador de rachas y siempre ha tenido sus días. Numerosas cesiones y demasiados cambios de piel, aunque cuando a él le preguntan por el motivo, siempre responde lo mismo:“A mí lo que me gusta es jugar, por eso estoy donde me dejan hacerlo”.
Con el balón como único compañero de viaje, pasó por Racing de Ferrol, Racing de Santander, Betis, vuelta a Villarreal, para terminar en el Rayo. El tapón de delanteros y las pocas opciones que le dio Paco Jémez hizo que el vigués comenzara a hablar con su club de propiedad cuando se enteró del interés del Valladolid. Braulio Vázquez respiraba tranquilo. El tiempo le está dando la razón.
Su apuesta por Pereira tuvo su reflejo ayer. Sus tres goles y sus dos asistencias resumen todo lo que este futbolista es. Gol y visión, buen trato de balón. Una pieza que ha encajado perfectamente en el puzzle de Rubi.
Aunque todavía queda mucho, lo más difícil, el ascenso, en el que Pereira quiere contribuir. Porque el premio del Valladolid también será el suyo. Su futuro está ligado a la buena estela del equipo vallisoletano. Si el ascenso es un hecho, la renovación de su cesión también lo será.
Noticia: MARCA
