Ebert lleva ya más de una semana apartado del equipo, entrenado a horario distinto al de sus compañeros, y con muy pocas probabilidades de que se vuelva a poner la camiseta blanquivioleta, pero eso si, cobrando está cobrando de unas maltrechas arcas como las del Real Valladolid. Ya son dos los partidos que el alemán se ha perdido tras su acto de indisciplina (Villarreal y Getafe) y sigue sin dar ningún tipo de explicación a los medios de comunicación. El futbolista pretendía salir en el mercado de invierno, pero ninguna de las ofertas por el futbolista agradó al club, como ya amenazó el Presidente del Real Valladolid anteriormente: «No aceptaré chantajes, el futbolista no saldrá porun euro   menos de lo que pedimos», y así ha sido, pero todavía queda la última bala para que Ebert y el Pucela ganen, que es un traspaso al fútbol ruso durante este mes de febrero (que aún tienen plazo para fichar). La puerta de salida está abierta por parte del club, pero el alemán deberá de traer una oferta interesante oara poder salir, o de lo contrario sefuirá «sentado en el banco» hasta el final de su contrato, situación en la que las dos partes pierden, por lo que lo mejor sería llegar a un entendimiento en los próximos días para que el alemán salga del Pucela con destino Rusia.