El francés suspira por marchar al Málaga; el congoleño, por llegar al Espanyol
El Espanyol puede desprenderse antes del fin de semana de un delantero joven como Thievy y enredarse en la adquisición de un veterano como el congoleño Manucho, delantero del Real Valladolid. Esos, ayer, eran los rumores que circulaban por Málaga, ciudad en la que desearía arraigar Thievy jugando en las filas del club del mismo nombre. Y también por Valladolid, donde Manucho afirmó el miércoles desconocer el nuevo interés del Espanyol por contratarle después de que no prosperó el primer intento de Javier Aguirre en verano.
Thievy, que superada su ‘crisis de ansiedad’ trabaja por separado, quiere jugar en el Málaga. Quizá hoy la empresa Goyen Group que quiere comprar sus derechos para cederle al club andaluz, llegue a un acuerdo con el Espanyol. Thievy es un activo perico, pero su vuelta al vestuario seria una bomba de relojería.
Se extrañan en Valladolid de que el Espanyol insista por un treintañero como Manucho, irrelevante este curso en el juego del equipo castellano, al que apenas ha aportado en once partidos de Liga y quien, como Córdoba, sólo ha marcado un gol. Con un contrato, eso sí, que al parecer supera los 800.000 euros y que expira el próximo 30 de junio. «No sé nada, pero estoy abierto a cualquier oferta», dijo Manucho el miércoles. El Valladolid dice que no vende, pero al que no vende es a Javi Guerra: igual situación, misma edad, pero 11 goles en 20 partidos
