Los canteranos Quique González y Carlos Lázaro, con contratos con el primer equipo pero escasas opciones de consolidarse en los planes de Juan Ignacio Martínez. El Valladolid está trabajando para llegar a una solución que satisfaga a todas las partes.
Quique se quedó fuera de la concentración de tres días que el Real Valladolid ha efectuado en la localidad sarda de Olbia (Italia) y el propio futbolista lo entendió como un mensaje de que no contaba para el técnico y que debía buscar una salida. Fuentes de la dirección deportiva aseguran que el canterano no entró en la citación por un motivo de plazas y que, si no hubiera sido él, otro futbolista habría permanecido en los Campos Anexos. De momento, se insiste, es un jugador con contrato profesional con el Real Valladolid.
El caso de Lázaro es más complicado, puesto que acaba contrato en 2014 y a partir de diciembre podría negociar con otro club, por lo que el Valladolid se plantea renovarlo y cederlo este año, ya que desde el Valladolid lo ven como una clara apuesta de futuro para el medio campo pucelano.
En los próximos días sabremos el desenlace de la situación de ambos canteranos, pero todo indica que JIM no cuenta con ellos para esta campaña y que los dos tendrán que hacer las maletas en busca de minutos en otros equipos.