Pregunta. ¿Con ganas de empezar?
Respuesta. Las ganas vienen ya de lejos, desde el mismo momento en que se plasmó el acuerdo con el club. Tengo ganas de conocer al grupo.
P. ¿Le costó mucho decidirse?
R. Para nada. Todo fue muy rápido. Tenían mi compromiso verbal y para mí la palabra es sagrada y eso que estamos en una sociedad en la que parece que se están perdiendo los valores.
P. El Valladolid, un nuevo reto. ¿Qué es lo que más le atrae?
R. Su historia. Es un equipo referente en Primera división, con muchas temporadas en la máxima categoría del fútbol español y con dos años pletóricos. El primero supuso el ascenso y el segundo la permanencia, todo ello con un buen fútbol. Es un club exigente y vamos a ver si estamos a la altura de ese compromiso que me han marcado desde la entidad.
P. El día de la presentación se deshizo en elogios hacia Djukic, pero viene de meter al Levante en Europa. ¿Ese pasado se puede volver en su contra?
R. Todo lo contrario. Ese trabajo que he venido haciendo en los últimos años me ha traído aquí. Los entrenadores dependemos del rendimiento de los jugadores. Si es bueno, desde luego beneficia a nuestra trayectoria. Y nuestro trabajo es precisamente ese, intentar sacar el máximo rendimiento a la plantilla que tenemos.
P. ¿Vértigo?
R. No, inquietud por saber si somos capaces de plasmar el trabajo que queremos en la plantilla que tenemos. Prácticamente está perfilada, aunque sabemos que hay jugadores apetecibles para otros clubes y lo que queremos es que si se marchan vengan otros de similar categoría. En ello trabaja la Dirección Deportiva.
P. ¿Le valen todos los que hay?
R. Para mí ahora son todos importantes. Esta es la plantilla que tenemos y quiero mostrar mi apoyo a todos. Luego, en el transcurso de la pretemporada y de la temporada veremos lo que pasa porque al final sólo pueden jugar once. Además, contamos con chavales jóvenes del filial que también nos pueden ayudar a completar lo que tenemos.
P. ¿Cuántos jugadores necesita en la plantilla?
R. Siempre he dicho que dos futbolistas por puesto y si alguno es polivalente, mucho mejor.
P. ¿Ebert y Rukavina, intocables?
R. La banda derecha del Real Valladolid de esta temporada ha sido una de las atracciones de la Liga por sus desdobles, asistencias y buen juego. Vamos a ver cómo se desarrollan los acontecimientos, pero yo tengo buenas vibraciones y creo que se van a quedar.
P. ¿Ficha o le fichan?
R. He hablado con Marcos y me ha asegurado que no me va a traer a un jugador que luego no vaya a utilizar. Él conoce mucho mejor que yo el mercado, sabe la idea del equipo pero lo que yo puedo aportarle también es importante. Me escucha, pero la última palabra la tiene él.
P. ¿Qué Real Valladolid vamos a ver con Juan Ignacio?
R. Siempre me ha gustado el buen trato del balón. Y esta filosofía casa con esta plantilla. Partimos del balón como nuestra principal defensa y sólo nos replegaremos o esperaremos cuando el contrario nos obligue a ello. Me gusta presionar al rival en su campo y daremos esos matices que nosotros queremos a través de esas transiciones defensa-ataque.
P. Y a la afición, que le dice…
R. No soy nadie, acabo de aterrizar. No puedo exigir nada. Lo que sí puede prometer Juan Ignacio Martín es ese grado de compromiso y responsabilidad que le avala en su trayectoria deportiva.