Un debut soñado, la mejor forma de arrancar una nueva etapa. Cyle Larin, con su gol en el minuto 90 que supuso la victoria del Real Valladolid ante el Valencia y el fin a la sequía de triunfos y de anotación, ha iniciado su etapa como blanquivioleta con buen pie. Pero él, que ha explicado en rueda de prensa sus sensaciones en estos primeros días como pucelano, asume con naturalidad su condición de goleador, promete seguir trabajando para ayudar al equipo y mira al próximo partido.

«Es un gran comienzo pero hay que seguir trabajando duro, entrenando duro. No siento presión, he jugado el Mundial, en Turquía… y creo que los goles van a seguir llegando, no me supone ningún peso extra, es mi trabajo» indicó el canadiense, quien explicó sus sensaciones en el césped de Zorrilla y su gol: «El ambiente era apasionado, podía sentir a la afición empujando, era un partido importante y había mucha pasión. Cuando entré en la cancha estaba listo para jugar, el equipo estaba bien, empujando por el gol. Tuve mi oportunidad, la cogí, entré al área porque sabía que la bola iba a ir ahí y entró. La bola está viniendo rápido, es instinto, he metido muchos goles y sabía que tenía que entrar ahí».

Larin mantiene el rumbo y continúa con su defensa de la importancia del grupo. «Vine para ayudar al equipo, asistir, marcar… juegue de titular, o si entro después, voy a seguir trabajando» apuntó, y reiteró que además de golear «soy capaz de jugar con el balón y hacer cosas diferentes». 

Como ejemplo de su implicación, se comprometió a «en dos meses creo que voy a poder hablar en español». Mientras que en clave de equipo, subrayó que «me han dado una buena bienvenida» y que ahora «es tiempo de concentrarnos en el próximo partido, seguimos escalando en la clasificación y hay que trabajar duro para ganar el siguiente».