El verano pasado el Real Valladolid se hizo con el jugador Kike Pérez, ejerció una opción de compra que tenía tras un año cedido por el Lugo. Ya la temporada pasada pese a que jugase en el Promesas ya se tenía en mente que el centrocampista terminaría en el primer equipo, solo te faltaban unos últimos meses para terminar su formación.

En una rueda de prensa de la temporada pasada, el propio Miguel Ángel Gómez informó del precio del traspaso: “Sergio puede contar con este jugador este año y de hecho estas son nuestras operaciones, jugadores que cuestan 100.000 euros y que en un futuro pueden ser vendidos por más de 3 millones”.

Ahora un año después, el futbolista forma parte del primer equipo, es seguido por varios equipos de Primera y cuenta con una cláusula de 25 kilos que podría ampliarse a 50 millones si el Valladolid quisiese.