El jugador del Real Valladolid Álvaro Aguado no ha tenido suerte desde que en enero de 2019 se hiciese oficial su fichaje por el club pucelano. Desde entonces ha jugado un total de 18 partidos y tan solo ha estado sobre el terreno de juego 821 minutos. En año y medio ha estado en tres equipos y en ninguno de ellos se ha asentado ni ha tenido regularidad.

En el fichaje por el Real Valladolid en enero de 2019, se acordó que esa temporada acabase cedido en el Córdoba, para que se terminase de foguear y así ayudar al conjunto andaluz en la busca de la permanencia. De Febrero a junio tan solo disputó 235 minutos repartidos en 8 partidos, con el paso de los encuentros dejó de participar en el Córdoba y además finalmente el equipo andaluz terminó bajando a Segunda B.

En verano de 2019, el centrocampista se incorporó al Real Valladolid para hacer la pretemporada y ganarse un puesto en el primer equipo, el cuerpo técnico le recomendó salir cedido en busca de minutos, pero el jugador finalmente decidió quedarse para jugar en Primera, tras 6 meses sin debutar en Primera y jugando tan solo 2 partidos de Copa del Rey (129 minutos), finalmente decidió salir cedido en el mercado de invierno, su destino sería el Numancia de Soria.

En enero de 2020 se incorporó al Numancia, poco a poco fue entrando en el equipo, pero nunca llegó a ser decisivo, además coincidió con malos resultados y tras el parón del Coronavirus dejó de entrar en el equipo. En Soria ha jugado 457 minutos repartidos en 8 partidos. Otra piedra en el camino para el joven centrocampista desde que llegó al Pucela, es que el Numancia ha decidido no prorrogar su contrato de cesión más allá del 30 de junio, por lo que el 1 de julio regresará a Pucela sin poder ser inscrito en la plantilla. El futbolista espera que la temporada 20/21 sea mejor a nivel personal.