Noticia de Arturo Alvarado para el Diario El Mundo de Valladolid
El libro de Garitano ya se cerró en el Real Valladolid con apenas 9 capítulos escritos. Como mucho, podrá escribir el epílogo. Si le dejan. Muy pronto será retirado del escaparate para que otro cuyo autor aún se desconoce ocupe su plaza.
La apresurada salida del presidente Carlos Suárez y del director deportivo Braulio Vázquez del estadio del Llagostera fue la sentencia para el entrenador. No pasaron por el vestuario porque no había nada que hablar. Todo estaba decidido. No había fe en la última bala, pero el hecho de que disparase al pie con el 3-1 fue la confirmación de que el relevo no sólo era necesario, sino imprescindible.
Desde que el árbitro pitó el final del partido comenzó el trabajo. Pero con calma, porque esta vez no habrá interregno. La destitución de Garitano llegará cuando se haya encontrado su relevo. Puede ser cuestión de horas, días e incluso de una semana. Porque esta decisión es clave, capital, decisiva. Ya no existe más margen de error y equivocarse de nuevo con el jefe del banquillo supone problemas no ya de éxito deportivo, sino de supervivencia empresarial.
¿Y qué quiere el Real Valladolid? A estas alturas de temporada no se busca, como en las tiendas; sino que se rebusca como en los cajones. No hay mucho disponible y, lo que está, muchas veces que es por algo.
El club pucelano cuenta con un serio hándicap: los entrenadores que esperan plaza en equipos de Primera. Los banquillos de Real Sociedad y Granada atraviesan zona volcánica y técnicos en paro aguantarán a que se produzcan las vacantes. El de Las Palmas entró ayer en erupción. Quique Setién, uno de los futuribles que manejaba el Real Valladolid, toma el relevo de Paco Herrera.
Desde Zorrilla ya han existido contactos con algunos por la vía de sus agentes. Se busca conocer tanto su disponibilidad como sus pretensiones económicas. Y algo que esta vez se considera de importancia capital: sus dotes psicológicas. La plantilla está con la autoestima por los suelos y con un fuerte bloqueo.
Uno libre que ahora suena de verdad es Eusebio. Se valora su conocimiento de la casa y su carisma, pero le falta experiencia y se busca un entrenador con ella. No precisamente Caparrós. Ni entrenaría por caché a un equipo en zona de descenso de Segunda División, ni gusta su fútbol.
También se ha preguntado por Miguel Ángel Portugal, quien rescindió con Bolivia. Djukic está descartado. Acabó mal con Braulio en el Valencia. Todavía peor que su representante, Bucero, con Suárez.
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