Muchos de los grandes equipos de Europa han hecho fichajes incomprensibles del todo para la mente humana. Es el caso de Prosinecky, Gravesen, Chygrinski y un montonazo más. Pero ahora quiero hablar de Edwin Congo.
¿Os acordáis de él? Este jugador colombiano nació el 7 de octubre de 1976 en Bogotá. Su paso por el fútbol profesional de su tierra natal fue fugaz, siendo una de las mejores promesas que dio el fútbol colombiano. Esa proyección astral del futbolista se hizo eco a los oídos de Lorenzo Sanz, el entonces presidente del Real Madrid, que lo fichó por 5 millones de euros (Unos 832 millones de las antiguas pesetas). Esto fue en el año 1999, ahí es nada.
Resultó que Edwin no era la promesa que tanto ilusionaba… Nada más fichar por el club blanco, empezó a pasar cedido por diferentes clubes (Valladolid, Vitória de Guimarâes y Tolousse) para acabar  vistiendo la camiseta del Real Madrid en el año 2001. Digo vistiendo, pero eso necesariamente no quiere decir que jugase. No jugó ni un solo partido oficial en la disciplina blanca. En pretemporada, por eso, metió un gol. Después de todo este baile inició otro distinto, el Real Madrid acabó por venderlo al Levante, del equipo azulgrana recaló en el  Sporting de Gijón, donde anotó 11 goles en 34 partidos, una de sus mejores temporadas. De ahí al Recreativo de Huelva para viajar rumbo a la libertad, se quedó sin equipo.
Pasados unos años fichó por el Olímpic de Xátiva, equipo que milita en Tercera División. De ahí se fue al U.D Benissa que participa en la categoría Preferente del fútbol Valenciano, para terminar su carrera deportiva en el Paiporta C.F de la Primera Regional de Valencia, en el año 2012.
Después de su retiro del fútbol, el colombiano decidió abrir un restaurante de comida caribeña en Valencia junto a sus hermanos, llamado el Blue Marlin. Tuvo que cerrar por una denuncia de impago de alquiler que aún está en vigor. Deben 12.000 €.  Los dueños del local no querian insistirles, por que ”la crisis nos afecta a todos”
Ahora nada se sabe de él. No tiene número de móvil, o no se conoce. El último de que se tiene constancia es del que utilizaba cuando militó en las filas del Levante U.D, y ya no existe.