EL CANCERBERO gallego espera poder ser él quien defienda la portería
de los pucelanos Alaba a Jaime, su competidor por hacerse con el puesto 

Diego Mariño llegó de puntillas al Valladolid. No se le esperaba. La portería del conjunto pucelano parecía bien
cubierta con Dani Hernández
y Jaime, que fueron rotando
banquillo y titularidad durante la pasada temporada. Sin
embargo, la llegada de Juan
Ignacio Martínez, en consenso con la Dirección Deportiva, propició la llegada de un
tercer guardameta que pudiera cubrir eventuales lesiones
o convocatorias del venezolano con su selección.

Por eso llegó Mariño. Por
eso y porque el conjunto blanquivioleta no podía dar la espalda a una oportunidad así.
Joven y con suficiente rodaje
para jugar en Primera. Su único inconveniente, la falta de
kilómetros en la élite.

Sin embargo, a Mariño no
le asusta en absoluto esta responsabilidad. Lo hizo como
primer portero del Villarreal
en una de sus etapas más
complicadas y, ahora, espera
y confía poder hacerlo en el
Real Valladolid. Esa es, en palabras suyas, su principal misión: “Para eso hemos venido. Está claro que la portería
de un equipo de Primera división, como en este caso es
la del Valladolid, está muy cara pero yo voy a pelear por un
puesto en el once”.

Buena pretemporada

Una de las cosas que el arquero más agradece en estos días es la satisfacción que supone el hecho de volver a disputar partidos: “Después de
todas estas semanas de pretemporada había ganas de que
llegaran los partidos, que es
lo que nos gusta a los futbolistas. Creo que el equipo ha
rendido a buen nivel, aunque  hay que seguir trabajando para llegar al mejor nivel”.

Sin Dani Hernández, que
jugará cedido el próximo año
en la Liga griega, la titularidad se ve más cercana, aunque reconoce la altura de Jaime: “Es verdad que, en principio, ahora sólo somos dos
jugadores para luchar por un
puesto en el once inicial. Pero Jaime es un gran portero al
que respeto. Vamos a seguir
trabajando para poner las cosas difíciles al entrenador y
que sea luego él el que decida finalmente quién debe ocupar la portería”.
De momento, el técnico se
muestra satisfecho con la evolución del balance defensivo
del equipo, lo que preocupó
durante los dos primeros
amistosos, algo que Mariño
también reconoce: “Sí que es
verdad que encajamos goles
que, en condiciones normales, no recibiríamos pero bueno, para eso están las pretemporadas, para corregir errores y ajustarnos a la idea que
tiene el entrenador».
Una de las virtudes del portero gallego es las opciones
que da al equipo, merced a su
buen manejo del balón, sobre
todo para un equipo al que
Juan Ignacio Martínez quiere dotarle de esta característica. Mariño no se esconde y
está dispuesto a asumir ese
protagonismo: “Siempre dije
que el juego del Real Valladolid se adapta a mis características o, mejor dicho, yo a su estilo de juego. Por eso no me lo
pensé cuando salió la oferta.
Acepto el protagonismo de ser
el primero en dar salida al balón. Es una de mis virtudes y
no me asusta jugar el balón
cuando el equipo lo necesite».
Fuente: MARCA